"Descubre la Esencia de la NATURALEZA IBÉRICA Y MEDITERRÁNEA a través de la Belleza de sus Paisajes y de sus Maravillas Botánicas y Faunísticas".
¿NO ENCUETRAS ALGO?
domingo, 11 de agosto de 2019
LA ARAÑA: MAESTRA TRAMPERA.
domingo, 16 de octubre de 2016
HORMIGAS SEMENTERAS: ¡VOLANDO VOY, VOLANDO VENGO…!
Hormigas de la Sementera saliendo de su hormiguero. |
©Emilio J. Orovengua
jueves, 28 de mayo de 2015
martes, 5 de julio de 2011
jueves, 5 de mayo de 2011
lunes, 30 de marzo de 2009
HORMIGAS DESOBEDIENTES
Unos investigadores descubrieron el elemento que delata a las hormigas obreras que violan la regla de la colectividad y, habiendo una reina presente, tratan de tener sus propias crías, indicó un artículo publicado en la revista Current Biology.
En la sociedad de las hormigas, las obreras normalmente renuncian a reproducirse y se dedican al cuidado de las crías de la reina que son sus hermanos y hermanas. Sin embargo, existen casos en los que algunas intentan procrear, por lo que sus pares las atacan y les impiden aparearse.
Las pruebas de laboratorio apuntan a que son los hidrocarburos producidos por las hormigas los que denuncian claramente la disposición de las más pícaras a la travesura.
Las conclusiones representan la primera prueba directa de que los hidrocarburos cuticulares son la base de información sobre la cual se aplica la política reproductiva del hormiguero, dijo Jurgen Liebig, de la Universidad estatal de Arizona.
Liebig y sus colegas demostraron que los perfiles químicos están relacionados con la fertilidad de la reina y las obreras en muchas especies de hormigas, algunas avispas, y las abejas.
Asimismo, encontraron que las obreras usan hidrocarburos para distinguir entre los huevos puestos por las obreras y los de la reina. Los compuestos químicos operan también en otros contextos incluidos el reconocimiento del nido y la atracción sexual.
Teniendo en cuenta todo lo que sabían acerca de los hidrocarburos como medio de comunicación, Liebig y sus colegas sospecharon que esos compuestos químicos eran los que delataban a las obreras con intenciones reproductivas.
Para probar la sospecha en una especie de hormigas (Aphaenogaster cockerelli), Liebig y Adrian Smith, otro de los investigadores, aplicaron un compuesto sintético, similar al de los individuos fértiles, en obreras no reproductoras.
Las inocentes así marcadas atrajeron la agresión en los hormigueros donde sí había una reina, pero no en aquellos hormigueros sin reina donde las obreras habían empezado a reproducirse.
Liebig cree que los hidrocarburos son "una señal inherente confiable" porque las hormigas no pueden separar sus propios hidrocarburos de los de sus huevos.
Según Liebig, "este sistema que descubre a las obreras que tratan de eludir las normas desempeña un papel importante para el mantenimiento de la armonía en el mundo de las hormigas".
Fuente: ADN.es
martes, 6 de enero de 2009
LA CONTAMINACIÓN LUMÍNICA ACABA CON LOS INSECTOS
Así lo asegura un estudio presentado hoy por el Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universidad de Valencia (UV), comenzado en 2004 y en el que durante este año se ha empleado un nuevo método digital para medir la incidencia del derroche de luz sobre la población de insectos del Parque Natural de la Devesa-Albufera.
Afecta a la orientación y a la reproducción
Los efectos comprobados en el estudio señalan, entre otras conclusiones, que una mariposa expuesta durante diez minutos a un foco de luz (por ejemplo, una bombilla) tardará al menos media hora en recuperar su sensibilidad visual.
Los resultados de este estudio, en el que ha colaborado el Ayuntamiento de Valencia, pueden extrapolarse a parques naturales y todo tipo de núcleos urbanos porque está comprobado, según estos investigadores, que en pueblos de latitudes altas se ha visto a mariposas de una determinada especie revoloteando entre las farolas cuando, en ese momento, deberían estar reproduciéndose en el monte.
sábado, 16 de agosto de 2008
EL ORTÓPTERO EXTRATERRESTRE
La Mantis Religiosa es, si así lo podemos decir, la reina de las reinas en el mundo de los insectos. Su nombre proviene del griego, Mantis mantis, y que en ese idioma significa “adivino”, un buen apodo para este extraño y fascinante animal.
El título de este artículo nada más lejos de la realidad, su aspecto es lo más parecido a la idea que tenemos nosotros de seres extraterrestes, de otro planeta. Esa cabeza en forma de pirámide invertida y esos grandes e hipnotizantes ojos, nos recuerda al ser más extraño del todo el Universo.
Su voracidad resulta realmente impresionante. Su apetito es insaciable. Es capaz de devorar presas enteras mucho mayores que ella, se atreve con arañas, grandes saltamontes e incluso con salamanquesas. Para la Mantis Religiosa nada es imposible, parece no existir enemigo demasiado grande o peligroso. Se atreve con cualquier criatura que se ponga a su alcance, tenga o no posibilidades de derrotarla, un auténtico depredador kamikaze.
Cuando la Mantis descansa ( o eso aparenta) su arma de guerra está plegada a su pecho, de ahí su nombre religiosa, debido a su clásica estampa de actitud orante. Es el único insecto que dirige la mirada a su víctima antes de ser cazada, y junto a esta mirada impactante aparece una cabeza móvil y flexible que puede girar en cualquier dirección a su voluntad.
Sus miembros anteriores y delanteros son un arma eficaz y temible, provistos de un arpón en la punta de las patas que captura sus presas y las atrae hacia un abrazo letal y erizado de espinas. Incapaces de moverse, sus víctimas son devoradas por este predador en cuestión de minutos.
Su modo de cazar es característico y conocido por la gran mayoría, aún así lo explicaré por si hay algún despistado. Esa actitud orante a la cual me referiría antes puede ser quebrada por cualquier criatura que tenga la desafortunada suerte de topaser con este ser. La Mantis, de pronto, como si de una descarga eléctrica se tratara, cambia su inofensiva e inocente actitud por una verdaderamente aterradora. Sus élitros (las alas posteriores duras) se sitúan oblicuamente y sus alas en forma de velas y de color fuego son desplegadas y su abdomen se dobla en punta hacia arriba. Cuando ya es demasiado tarde para que la víctima pueda reaccionar, la Mantis disparar sus patas arponadas hacia delante, se clavan, hieren y arrastran a la víctima todavía viva hacia sus poderosas mandíbulas. Repliega su estandarte de combate y comienza el gran festín, manipulando con gran maestría la infortunada criatura que aún tiene fuerzas para lanzar al aire algunas patadas. Pero ya es demasiado tarde, su cuello ha quedado descubierto y este es el momento que la Mantís aprovecha para devorar a su presa, matándola definitivamente.
La reproducción de la mantis religiosa comienza a finales de Agosto y es un tanto especial… La naturaleza quiso que la hembra de esta especie fuera más favorecida que el macho, ya que es bastante más grande y voluminosa que su modesto cónyuge. Una vez cumplido el protocolo nupcial, es decir, el ritual de apareamiento y la cópula, la “amada” agarra a su presunto amor y comienza a comerse su nuca según usos y costumbres de esta especie. Bocadito a bocadito el macho va siendo metódicamente comido por su pareja. La cópula de estos insectos se prolonga 5 ó 6 horas e inmediatamente después de la fecundación la hembra comienza su macabro festín, a veces incluso antes de haber finalizado la cópula, todo un detalle que el “novio” no vivirá para contarlo.
©Emilio J. Orovengua
domingo, 6 de julio de 2008
HORMIGAS: TRABAJADORAS POR NATURALEZA
El trabajo de las hormigas podríamos compararlo con el trabajo que se realiza en las grandes industrias, donde las hormigas serían los camiones de transporte y la industria su enorme y laberíntico hormiguero estructurado jerárquicamente, donde cada semilla, cada huevo, cada larva es situada en un determinado y específico lugar de esta magnífica construcción subterránea .
Puede que la anterior comparación sea algo confusa, pero ¿quién se fijó en quién?. Si buscamos un poquito en la insólita y fascinante Naturaleza, nos daremos cuenta que todo aquello que rodea al hombre, no es sino una mera copia de la Madre Naturaleza.
Describir a estos maravillosos y casi inmortales seres es realmente difícil, no basta con decir que son unos diminutos bichitos que la mínimo descuido se nos han metido en el pan o se están comiendo ya las magdalenas. La vida de las hormigas es mucho más compleja que todo esto, es el día a día, la lucha por la supervivencia, la obligación de encontrar comida para continuar existiendo, la lucha contra las inclemencias ( sean del tipo que sean).
Con una armónica organización casi perfecta, mucho mejor que la de los humanos, en la que cada uno de sus miembros que componen una comuna de este tipo sigue una estricta y dedicada obligación sin que, ni por un momento, esta organización se rompa. En cada hormiguero existe una o varias reinas cuya función es la de ser fecundada y poner huevos que más tarde darán lugar a pequeñas larvas que tras sufrir una metamorfosis se convierten en ninfas y luego en insectos adultos. Se distinguen también los soldados y las obreras a las cuales se les asignan diversas actividades como la construcción del hormiguero, cuidado y alimentación de la prole, recolección de comida y defensa del hormiguero, y por último un tercer tipo que son las hormigas sexuadas o machos (también llamados hormigones) que están alados durante el periodo nupcial y cuya obligación es fecundar a la reina. De esta manera este ejército es renovado cíclicamente.
Y nada mejor para finalizar este artículo que una frase de Benjamín Franklin que habla por si sola: NADIE PREDICA MEJOR QUE LA HORMIGA, Y NO HABLA.
Emilio José Orovengua López
viernes, 6 de junio de 2008
sábado, 24 de mayo de 2008
VIVIR DE LA MADERA
La mayoría de los devoradores de este casi inútil alimento son larvas de insectos, es por ello, que antes de convertirse en adultos pasen largos periodos de tiempo en vida larvaria.
Las orugas de la mariposa cabruna pueden infestar un árbol, devorar su corteza y dejar unos agujeros de los que rezuma una mezcla pegajosa de excrementos y serrín que apesta a macho cabrío, de ahí su peculiar nombre.
Nuestros vecinos y odiados isopteros, las termitas, a pesar de su xilofagismo son incapaces por si solas de digerir directamente la madera (sólo la pueden tratar fisicamente) y para ello se ayudan de una maquinaria microorgánica alojada en su tubo digestivo, los protozoos, que descomponen químicamente los microfragmentos de madera.
Algunos roedores como las ardillas o los castores, mordisquean la madera de ciertos árboles madereros produciendo grandes deformaciones en estos.
En determinados casos, si un mismo árbol alberga varios tipos de escarabajos de la corteza, estos pueden llegar a destruir no sólo el floema (principal conducto distribuidor de nutrientes de la planta, "savia elaborada") sino, también, la capa vital de cambium la cual genera nuevos haces conductores contribuyendo al crecimiento del árbol. Así, por encima de la capa atacada el árbol no puede crecer y esta zona queda muerta. La introducción de la Enfermedad Fúngica Americana, denominada aquí Enfermedad Holandesa del Olmo o GRAFIOSIS fue llevada a cabo por una o dos especies de estos escarabajos de la corteza, que aunque no están implicados directamente en el desarrollo de esta enfermedad en los olmos, si intervienen como vectores de transmisión de su verdadero agente fitopatógeno, un hongo microscópico denominado Ceratostomella ulmi.
Pero aún después de muertos, los árboles siguen sirviendo de alimento. En la naturaleza todo es reciclable y para ello ésta tiene dedicados y eficientes biodegradadores. Cuando la madera muerta se pudre es atacada por larvas de moscas que la acribillan favoreciendo la acción de hongos, bacterias y actinomicetos ; los residuos resultantes son aprovechados y devorados por varios tipos de organismos como cochinillas de la humedad y miriápodos. Finalmente, la gran mayoría del material es reciclado e incorporado a otras plantas mediante el suelo, a través de un complejo proceso de mineralización.
©Emilio J. Orovengua